Dejame soñar, dejame volar...

Problemas, problemas, problemas, problemas y más problemas. Mi vida parece ser un gran problema. No me siento bien, ni agusto, ni cómoda, ni conforme con el mundo. Esta en contra mía. Cuando pensaba que algo me salía bien, volvía a caer. La historia se repite otra vez. Sin descanso. Sin tregua. No sé si soy una incomprendida o yo que sé. Si soy la única que se siente así. Que a cada paso que doy, fracasó. Me estan quitando lo poco que me queda. Me estoy vaciando. Y cuando no me quede ni la mínima gota, no sé que pasará. Quizá me vuelva loca o problemática o antisocial o cualquier cosa. Si no es un lado es el otro. Si no es el norte es el sur. Si no es el colegio es mi casa. No paro, y la vida sigue. Y yo ya me empiezo a cansar de tanto andar, que yo quiero aprender a volar. Quiero anticiparme a la vida. Quiero que la vida pase, hasta que yo diga stop. Y se pare donde yo quiera. En la hora, minuto y segundo que a mi me apetezca. Quiero comerme el mundo, quiero que mi vida sea mia. Que nadie me controle. Quiero ser libre. Y yo que sé serán cosas de la edad. Tengo 15 años casi 16, será la edad del ''pavo'' lo que me hace sentirme así de reprimida, triste y mal. Será por eso que solo me apetece llorar, en el rincón más escondido de mi habitación. Para que nadie me pueda ver, nadie me consuele. Porque aparento lo que no soy. Fuerte y valiente. Que puedo con todo. A otro con ese cuento. Porque yo ya no me lo creo, el mundo es una mentira y yo formo parte de ella, por desgracia. Estoy muy cansada de que siempre me repitan lo mismo. Que yo ese cuento ya me lo sé de memoria. Ya me lo han leído muchas veces. Me lo han recalcado. Para aver si aguanto la presión o algo. Para ver si me vuelvo loca.
No quiero existir. Porque para lo que sirvo, la verdad. Mejor no ser nadie. Anónima. Yo no conocer y que no me conozcan. Que bonito pinto el mundo ¿no?